sábado, 13 de marzo de 2010

¡Motivarnos!

En mi opinión desde que somos pequeños nuestros profesores deberían intentar que aquellos conocimientos que vamos a desarrollar en los años siguientes como estudiantes se nos quedaran desde un principio en la memoria a largo plazo, de ese modo llegado el momento de ampliarlos lo tendríamos mucho más fácil.

Para ello, en los cursos de primaria los profesores deberían utilizar el conductismo, ofrecer una recompensa cada vez que se haga algo positivo, así seguiríamos actuando correctamente. Por ejemplo, un profesor hace una pregunta a un alumno acerca del temario, si este es capaz de contestarla razonando y no de memoria recibirá un positivo, y sino un negativo. Pero para que pudiera darse esto, los profesores deberían hacer preguntas continuamente y comprobar que los alumnos razonan y que por lo tanto se dará en ellos una probabilidad más alta de que esa información se esté guardando en la memoria a largo plazo.

También desde edades muy tempranas se nos debería incitar a la lectura (no se considera incitar a OBLIGAR a leer un libro al trimestre, sino por ejemplo provocarnos ganas de leerlo contando cosas interesantes sobre su argumento), así crearíamos una serie de esquemas cognitivos (sobre diferentes temas) que más adelante nos servirían como inclusores y nos permitirían adquirir nuevos conocimientos con menor dificultad.

Volviendo al conductismo, creo que dejaría de ser efectivo(a mi parecer) en los cursos más altos de la ESO y bachillerato, al menos con positivos como recompensa (aprobar sería un buen incentivo siempre y cuando estuviéramos motivados a estudiar). Un positivo, no sube la nota y un negativo que no va a hacer que suspendas (obviamente) no nos incentivan ya nada.

Por ello, creo que si has llegado al bachillerato ha sido gracias a que tus profesores y familia han sabido crear en ti una motivación provocándote unas ganas de luchar y conseguir algo en tus estudios. Y no deberían dejar de hacerlo hasta ver tu propósito conseguido.

martes, 2 de febrero de 2010

¿Ha mejorado el mundo la ciencia?

Me costaría entender que alguien diera una respuesta inmediata a esta cuestión, imagino que aquella que lo hiciese lo habría hecho sin plantearla como se merece y no se habría fijado en más de un aspecto a tener en cuenta.

Como me paso a mí, la verdad es que lo primero que pensé cuando mi profesor de filosofía plateó la pregunta fue que si, ¡claro que sí! Pensé en la medicina, que sufre mejoras gracias a la ciencia continuamente, avances en curas y tratamientos de enfermedades o en investigación para descubrir alguna vacuna contra el cáncer, el SIDA... Está claro que si solo pensara en la medicina, la ciencia habría cambiado el mundo de una forma muy positiva sin lugar a dudas.

Ahora bien, tras reflexionar en lo amplio de la palabra ciencia pensé en las armas, al igual que la medicina a sufrido avances y “mejoras”, esta vez en contra de la vida humana, como se aprecia claramente en la definición de armas químicas.


“Las armas químicas son armas que utilizan las propiedades tóxicas de sustancias químicas para matar, herir o incapacitar al enemigo.”


El armamento ha mejorado de tal modo que cada vez se mata más fácilmente. En la primera guerra mundial fallecieron 10 millones de personas, en la segunda más 50 millones, si hubiera una tercera, quien sabe si alguna bomba de destrucción masiva en la cual seguramente se hubiera invertido demasiado tiempo y dinero no se llevaría la vida de toda la especie humana.


Entonces, ¿La ciencia ha mejorado el mundo? EN PARTE. Ahora tenemos mayor número de recursos para hacer de nuestra vida una vida más cómoda, el índice de mortalidad de aquellos países donde la medicina esta avanzada es muy bajo (a edades tempranas) y disfrutamos de aparatos tecnológicos para comunicarnos con cualquier persona del mundo, pero… ¿De qué nos sirve todo esto si también desarrollamos instrumentos que destruyen aquello que más valor tiene, una vida?


La ciencia bien utilizada puede salvar vidas y mal utilizada quitarlas. Está en nuestras manos suprimir los aspectos negativos de la ciencia y así mejorar el mundo sin tener que mirar un lado negativo en ella.


martes, 1 de diciembre de 2009

Un ¡Si! a ser dueña de tu vida

Estoy a favor del aborto. Pero lo estoy no por aquellas chicas que se buscan ellas mismas quedarse embarazadas practicando sexo no seguro, sino, por aquellas otras a las que se les rompe el preservativo, tener un hijo a la edad de 16 años es arruinarte la vida viéndolo de una manera egoísta para ti misma, pero no solo eso, también arruinársela a ese hijo al que no podrás mantener y cuidar, por ello, antes de los 3 meses me parece bien que se pueda abortar, pues, el feto aún no es considerado persona(desde un punto de vista científico).

Que una chica de 16 años pueda abortar sin el consentimiento de sus padres es algo que me gustaría plantear más detenidamente.
Creo que es necesario que los padres estén informados, pero siempre y cuando vayan a dejar a la elección de su hija si seguir adelante o no, si ella a sido lo suficiente madura como para practicar sexo(ya sea seguro o no) también es madura para decidir por si misma en ese tema.

Si todas las familias fueran como la mía, esta ley sería innecesaria. Mis padres no elegirían por mi, no me obligarían a tenerlo ni al contrario, pero no todas las familias son así, es por eso que también estoy a favor de esta ley, no para mi beneficio personal, como podría ser en el caso del aborto en general(porque quién sabe si yo con solo 16 o 17 años me veré accidentalmente en esa situación), sino, esta vez por aquellas chicas que viven en familias tradicionales, antiguas.. cuyos padres las obligarían a vivir una vida que ellas no han elegido, a tener que cuidar unos hijos que ellas no querían tener y a renunciar a todos los sueños que querían cumplir antes de pensar en ser madres.

Yo creo, que todos tenemos derecho a elegir cuando queremos ser padres, o al menos, a serlo cuando no somos tan jóvenes, ya que, ahora mismo nos cuesta hasta cuidar de nosotros mismos

Es tu vida, son tus decisiones. ¡Y no! No haces daño a nadie.

miércoles, 21 de octubre de 2009

¿Conocimiento vs Felicidad?


¿Es más feliz quién más conocimiento posee?
Múltiples personas opinarían que si, quizá incluso más que las que darían la respuesta negativa, pues es el conocimiento lo que lleva al progreso, base de la globalización en la que vivimos pero..¿Me haría más feliz conocer más en profundidad la vida en el planeta Tierra, por ejemplo? Adquiriría un conocimiento que me llevaría a descubrir que somos.. ¿nada? Una pequeña parte de algo, fácilmente destructibles ya que ante un fuerte cambio climático nos extinguiríamos como el resto de las especies, o al menos como la mayoría porque ni siquiera somos los más fuertes.
Visto así no parece que SI sea la respuesta idónea a mi pregunta quizá saber más cosas sobre el mundo que nos rodea lo único que crea son una serie de preocupaciones que nos llevarían a disminuir nuestro nivel de felicidad.


Por otro lado, aquel que sea consciente del problema (en este caso aquel que sepa lo que pasaría si se produjese un fuerte cambio climático) sabrá mejor como afrontarlo y poner todas las medidas posibles para evitarlo.
Debido a ello, creo que quien posee un mayor conocimiento, puede resolver más fácilmente los problemas que le surjan a lo largo de su vida.


Y teniendo ya las dos respuestas a mi pregunta yo optaría por la primera, porque la gente tiene demasiadas preocupaciones hoy en día y en mi opinión quien no sabe, siguiendo con el ejemplo, que si seguimos así acabaremos por extinguirnos, siempre tendrá menos preocupaciones y será por ello más feliz que aquella que si lo sepa y dedique su tiempo a intentar evitarlo y no a disfrutar de la vida, haciendo así de ella una vida más infeliz.